«Previo a la operación, y desde que supe que la necesitaba, me encontraba triste, con aflicción, preocupada, porque no sabía cómo era una operación, ya que es la primera vez en la vida que me sometería a una cirugía. Había momentos en los que me conformaba y tranquilizaba, pero de nuevo había momentos en que me desesperaba. Mi familia me preguntaba cómo me sentía y yo les decía que un poco angustiada, pero yo me dije: «Me pongo en las manos de Dios y de un gran médico y yo confío en que todo saldrá bien.
Efectivamente, en el momento de la cirugía, me puse en las manos de Dios y del Dr. Calos Ramos Hinds y confié en Él que todo saldría bien.
Después de la operación, yo no sentí nada, como si no me habían operado, y al pasar de las hors me dolía muy poco, un dolor realmente muy suave, peo me sentía contenta que ya todo había pasado.
Me sentía tranquila, muy contenta y agradecida con el Dr. Ramos Hinds por la manera en la que se comportó conmigo desde el principio.
Al día siguiente, ya tenía hambre y me sentía muy contenta que estaba toda mi familia a mi lado.
Luego fui a las citas de control y todo siguió muy bien.
Gracias Doctor por todo. Estoy muy agradecida y mi familia también. Que Dios lo bendiga.»
Virginia Cruz Viuda de Escobar.